The First Hunter Cap. 32

Capítulo 32: Episodio 32 - El Mesías, Parte I

Capítulo 12. Mesías, parte I

1.

Un centro comercial a gran escala ubicado frente a la estación New Jungdong ...

Ahora era una fortaleza tranquila, llena de gente todo el tiempo.

Todas las ventanas estaban cubiertas de periódicos y la entrada, que recibía con entusiasmo a los invitados, ahora estaba amurallada con carritos de la compra enredados.

Tres hombres se acercaron a la entrada, con gruesos jerséis, cascos de seguridad y lanzas toscamente confeccionadas.


Se pararon frente a la puerta automática, que estaba cubierta de periódicos, y uno de ellos sacó con cuidado una tarjeta de visita del interior y la pasó por la puerta.

¡Silbido!

La tarjeta de presentación desapareció como si fuera la lengua de una serpiente y pronto se abrió la puerta.

Más allá de la puerta, tres hombres estaban tensos, apuntando una lanza a la puerta. Se relajaron solo después de confirmar a la otra parte.

"¿Que encontraste?"

“No puedo ver nada. El clima parece loco ".

"¿Qué pasa con el grupo B?"

"No pude encontrarlos".


"¿No los encontraste?"

"No había cadáveres".

No fue una conversación agradable.

“¿Qué pasa con las huellas? Podías ver huellas, ¿no? "

“¿Has visto este clima? ¡Nuestras huellas ya se han ido! "

"Entonces, ¿acabas de regresar?"

“¿Qué diablos se suponía que debía hacer? ¡Fuera de mi camino! ¡Tengo suficiente frío para morir! "

Finalmente, la conversación se volvió intensa en algún momento, y los que custodiaban la puerta se hicieron a un lado.

Tres hombres, con los hombros y la cabeza cubiertos de nieve, entraron al centro comercial.

Los tres hombres que entraron al centro comercial inmediatamente se quitaron los cascos y un hombre de rostro regordete dijo: “No es un maldito Despertador, pero nos trata como esclavos. ¡Un agujero! No puede hacer nada frente a un monstruo ".


Las palabras que se pronunciaron con ira fueron tan bajas que estuvieron cerca de hablar para sí mismo, contrariamente a la expresión feroz.

Los dos hombres restantes se apartaron del tema como si no quisieran continuar la conversación con ese hombre.

"Esta noche hará más frío".

“Me acostaría con una chica en ese caso. ¿Qué hay sobre eso? ¿Quieres tomar uno?

Pero el joven respondió a las palabras del gordo con una sonrisa incómoda: "Está bien".

"Lo único bueno que tenemos en este maldito mundo es que podemos hacerlo gratis".

"... ¿Qué pasó con el Grupo B?" Otro hombre de unos 20 años quería cambiar el tema.

"Estoy seguro de que hubo un accidente en alguna parte, tratando de disfrutar de una chica llamada Baek Ji-yeon". El gordo cambió el tema de conversación por uno desagradable.

"Había un tipo llamado Ahn Tae-seok que estaba loco por las mujeres, y no hay forma de que no se emocione allí con una mujer desnuda tendida frente a él en la nieve".

El joven renunció a continuar la conversación. 'Maldito cerdo, ¿es eso lo único que te viene a la mente en esta situación?'

Afortunadamente, las sucias historias del gordo no duraron mucho. "Maldita sea, voy a tomar una foto hoy ..."

"Habla esas historias a solas". Una mujer salió de la oscuridad, delgada como un esqueleto, como si estuviera a punto de desmoronarse de inmediato.


La apariencia de la mujer provocó una espantosa expresión distorsionada en el hombre gordo. Pero tan pronto como vio la marca en el dorso de su mano derecha, su rostro distorsionado se puso azul.

"¡Lo siento lo siento!"

"Lárgate de aquí, eres repugnante".

"Lo siento, lo siento, solo perdona mi vida, por favor perdona mi vida ..."

"Sal de aquí."

Los tres hombres asintieron vigorosamente y desaparecieron mientras corrían hacia la escalera mecánica y huían al segundo piso.

La mujer se dirigió a lo que originalmente era una farmacia, ubicada en la esquina del primer piso.

Había dos hombres en él.

Uno se puso erguido, actuando como guardaespaldas, y el otro se sentó en el sofá, golpeando su suave cabello, sosteniendo una espada con la vaina en su mano derecha, como algo salido de un drama histórico.

La mujer le dijo al hombre en el sofá: "Debe haber un alboroto".


"¿Disturbio?" Ante las palabras de la mujer, el hombre dejó de golpearse la cabeza. "¿Qué pasa?"

“Falta el grupo que salió a ejecutar a una mujer como ejemplo”.

"¿Desaparecido?"

"Sí."

"¿Se los comió un monstruo o se escaparon?"

"El equipo intentó investigar, pero falló".

"¿Ha fallado? ¿Por qué?"

"Por la nieve y el viento ..."

Ante esas palabras, el hombre soltó una risa repentinamente incontrolable y volvió a golpearse la cabeza con el mango de la espada.

“Deberías haberle dado a la organización un nombre diferente, no Mesías. Todos nos miran como un ángel enviado del cielo a algún paraíso. Tendré que enviar a los hombres que salieron como equipo de búsqueda a la estación New Jungdong por la mañana cuando salga el sol, con el tendón de Aquiles cortado, y espero que al diablo de ojos amarillos le guste ". El espadachín sonrió levemente.


3.

La ventisca no dio señales de detenerse, ni siquiera en la noche oscura.

Kim Tae-hoon estaba mirando hacia el gran centro comercial desde un edificio ubicado al otro lado de la calle. La ventisca bloqueó su visión, pero no hubo problema para dibujar en su mente.

"Las puertas están estrictamente vigiladas, pero su estado armado es crudo y nadie hace guardia en el techo".

Kim Tae-hoon escaneó el área a través de la ventisca y la espesa oscuridad.

“Baek Ji-yeon dijo que había unos sesenta candidatos para el sacrificio dentro, y unas treinta personas observándolos y vigilando el gran centro comercial. Además, los sacrificios se mantuvieron en el segundo y tercer piso ”.

Oscuridad y ventisca.

Lo que todos los animales hicieron frente a estas dos cosas fue lo mismo: simplemente se agacharon tanto como pudieron en la oscuridad donde pudieron evitar el viento, y esperaron a que pasara la fría y larga noche.

Los humanos han escapado de tal comportamiento usando herramientas, pero los humanos en el gran centro comercial no eran diferentes de los animales.

Kim Tae-hoon se dio la vuelta.

Comenzó la caza.

4.


¡Kwa-kwa-kwang!

Solo tomó un momento

Un camión enorme se precipitó hacia la entrada del gran centro comercial y, después de atravesar las puertas automáticas de vidrio, entró en la entrada del gran centro comercial.

"¡Aaaaaaargh!"

Las tres personas, que custodiaban la puerta en esta situación repentina, fueron atropelladas por el automóvil y fueron aplastadas impotentes.

"¿Que esta pasando?"

"¿Es un terremoto?"

La gente, que se vio obligada a dormir en el frío en todo el gran centro comercial, se asustó y se despertó.

"¡Un camión se estrelló contra la entrada!"

La perturbación llegó al tercer piso después de pasar el segundo piso.

Los vigilantes, que originalmente habían estado en la peluquería y la lavandería, ahora utilizados como prisiones para encerrar los sacrificios, se miraron unos a otros tan pronto como escucharon el alboroto.

"¿Qué diablos pasó en el primer piso?"

"¿Un monstruo?"

Durante la agitación, la puerta de hierro del pasaje de emergencia al tercer y cuarto piso del estacionamiento se abrió con cuidado.

Alguien se movió rápidamente a través de la puerta abierta, y el hombre que la abrió tan secretamente la cerró con tanta fuerza que era obvio que el secreto no era su objetivo.

¡Estallido!

Era una puerta realmente sólida.

Sus tímpanos tronaron. Fue suficiente para que todos en el tercer piso lo escucharan.

“¡Argh! ¿Qué es este sonido?

"Bueno, suena como una puerta cerrada".

"¿Puerta? ¿Dónde está la puerta aquí? Está conectado con el estacionamiento por una pasarela móvil, ¿no es así? "

"Salida de emergencia, hay una salida de emergencia, pero la salida de emergencia estaba bloqueada ..."

La gente empezó a tragar saliva, tensa y nerviosa por lo que iba a pasar.

También temblaban los que esperaban ser sacrificados con las manos y los pies atados.

"Ir."

"¿Qué?"

"Ve, podría ser un monstruo".

"Mierda."

Finalmente, uno de ellos se puso el casco, agarró su tosca lanza en la mano y se dirigió a la salida de emergencia.

Maldita sea, ¿por qué está pasando esto? Sus pasos estaban llenos de pesar e irritación, y su ansiedad y miedo los hacían pesados.

¿Y si es un monstruo?

¿Y si pasa algo?

¿Moriré aquí?

¿Voy a ser comida para un monstruo?

En tal situación, el hombre que investigaba la puerta de emergencia se acercó con cuidado. Miró a su alrededor, buscando señales.

'¿Nada?'

No había rastros en sus ojos. Solo hubo un leve indicio del rastro de un hombre, y la puerta se cerró, pero no una señal muy perceptible.

No, el hombre esperaba que esto no fuera nada, por lo que le pareció al hombre que esto no era nada.

"¡Uf!" En ese momento el hombre suspiró aliviado.

Con ese suspiro, el hombre que decidió que nada iba a pasar regresó por donde había venido con un paso más ligero.

Luego dijo: “¡Nada! Nada…"

Cuando el hombre regresó a su lugar original, lo primero que vio fue a alguien con un agujero en la cabeza y un compañero de trabajo en el piso con el cuello girado 180 grados.

"¿Mmm?"

Y eso fue lo último que vio, cuando el hombre que se acercaba por detrás se rompió el cuello de inmediato.

krak ... Cuando el hombre cayó flácido, una de las mujeres programadas para el sacrificio gritó.

Ignorando el grito, el hombre actuó con calma. No se molestó en detenerla. Más bien, la dejó gritar y tomó el jersey y el casco que llevaba uno de los tipos caídos.

Luego, gritó a aquellos que escucharon el grito que subía al segundo piso a través de la escalera mecánica.

“¡Tenemos un problema en el tercer piso! ¡Vamos!"

"¿Problema?"

"¡Vamos! ¡Rápidamente!"

"Ah, vale."

El hombre, que respondió de inmediato, se dirigió a la escalera mecánica y detrás de él apareció una Flecha sin plumas.

5.

"¡Maldita sea, no hay nadie en el camión!" gritó un hombre, revisando el asiento del conductor del camión que había atravesado la entrada.

Los diez hombres reunidos alrededor de la entrada mostraron una mirada similar a sus palabras. Tenían la cabeza ladeada y fruncían el ceño.

"¿El camión se movió solo?"

"¿Tiene sentido?"

"¿Qué diablos está pasando? Este camión no es un monstruo, ¿verdad?

La perturbación añadió un nuevo revuelo.

"¡Algo pasó en el tercer piso!" Un hombre bajó por una escalera mecánica que conectaba el primer y segundo piso.

No se diferenciaba en nada de los demás en jersey y cascos. Nadie impidió que los hombres bajaran corriendo por las escaleras mecánicas hasta el primer piso.

Más bien, los que estaban en el primer piso miraron a la persona que bajaba con sorpresa. Uno de ellos preguntó: “¿El tercer piso? ¿Qué pasó?"

"¿Qué? ¿Qué pasa con el primer piso? ¿Por qué hay un camión atascado en la entrada?

"No lo sabemos, maldita sea, ¡de repente el camión acaba de chocar contra la entrada!"

"¿Entonces? ¿Es por eso que estás aquí? ¿Y los guardias? ¿Están viendo los sacrificios? "

“¡Mierda, ese no es el punto! Dile a los hombres de allí que bajen ahora. ¿Qué puede hacer un sacrificio? "

"Entonces están casi todos aquí". La voz del hombre cambió en un instante.

"¿Mmm? Espera, espera, ¿quién eres tú?

El hombre actuó muy rápido.

Pak!

Golpeó la cara de la persona que notó que no era un colega, golpeándole en la cara como si hubiera sido golpeado por un enorme martillo. Su cráneo se arrugó como tofu.

Al mismo tiempo, el hombre sacó el imperdible de la granada que sacó del bolsillo de su jersey y se la arrojó a la multitud reunida alrededor del camión.

Nadie respondió a tiempo.

Por supuesto, todos quedaron atrapados en la explosión mortal de la granada, sin ninguna resistencia ni preparación.

Ni siquiera fue el final.

"¡Aaaaaaargh!"

En el momento en que un grito salió de la boca de un afortunado sobreviviente, sonó un disparo corto.

Un disparo de confirmación.

Los disparos de confirmación acabaron con todos los reunidos alrededor del camión en el tiempo que tomó respirar profundamente.

Sin supervivientes.

La mirada de Kim Tae-hoon se volvió inmediatamente hacia la esquina de la tienda en el primer piso del gran centro comercial, que era visible desde la entrada.

En ese momento, su Sentido de Hobgoblin le advirtió del peligro.

Tan pronto como giró la cabeza hacia la izquierda, dos bolas de fuego crepitantes del tamaño de una pelota de béisbol volaron hacia él.

La bola de fuego tocó el jersey de Kim Tae-hoon y se movió sobre él como una criatura viviente, prendiéndole fuego.

Kim Tae-hoon inmediatamente se quitó el saltador, apuntó su arma en la dirección de donde venía, apretó el gatillo e inmediatamente se zambulló entre dos contadores.

En ese momento, escuchó a alguien decir: "No sabía que iba a pelear contra un despertador real tan rápido, pero esto es divertido".

Fue la primera vez que lo escuchó, pero Kim Tae-hoon estaba convencido en este momento.

'Lee Jin-sung'.

¿Quién era el dueño de la voz? ¡El jefe del Mesías estaba aquí!